Los próximos días 24 y 31 de octubre secundando las Acciones Reivindicativas de CERMI Andalucía, tendremos una concentración a las 12 de la mañana en la puerta de la residencia Pedro Gámez durante unos cinco minutos donde se leerá un manifiesto para alzar la voz en nombre de las personas con discapacidad, sus familias y todos los profesionales que dedicamos nuestras vidas a su bienestar y a posibilitar el ejercicio de sus derechos. La situación es crítica y exige respuestas urgentes.
En Andalucía, más de 550.000 personas con discapacidad dependen de los servicios que ofrecemos. Estos servicios, que mejoran su calidad de vida y garantizan sus derechos fundamentales, están bajo amenaza debido a la falta de una financiación adecuada y sostenible.
Las entidades de discapacidad hemos soportado durante años una carga creciente de costes, incluyendo aumentos salariales, incrementos en los precios de suministros y nuevas exigencias legales. Aunque reconocemos el esfuerzo del ejecutivo andaluz en las dos últimas legislaturas, este no ha sido suficiente. La disparidad entre los costes reales y los recursos destinados a la financiación de los centros nos está llevando al límite de lo insostenible.
Por esto exigimos:
- Al Gobierno Nacional: La elaboración y aprobación de un Pacto de Estado para la viabilidad del sistema de la Ley 39/2006, asegurando que todas las personas tengan los mismos derechos en los distintos territorios e incrementando la financiación del nivel mínimo de protección.
- A la Junta de Andalucía: Un nuevo modelo de financiación que cubra no solo los costes de funcionamiento, sino también los necesarios para ofrecer una atención de calidad, innovadora y ajustada a las necesidades de cada persona.
Reivindicamos una financiación que cubra los costes reales, un compromiso firme por parte de las autoridades para una solución a largo plazo, y un pacto social y político por la discapacidad que garantice la estabilidad de las entidades sociales y los servicios que prestan.
La discapacidad no es una cuestión de caridad, sino de derechos. Los servicios que prestamos son esenciales para la inclusión y participación de las personas con discapacidad en la sociedad. No podemos permitir que el esfuerzo y la dedicación de todos los trabajadores, familias y personas con discapacidad se vea socavado por la inacción de aquellos que pueden cambiar esta situación.
Hacemos un llamado a toda la sociedad para que nos apoye en esta lucha. Una sociedad que no protege a sus miembros más vulnerables falla en su responsabilidad más básica. Que esta llamada de atención sea el principio de un movimiento que no se detendrá hasta garantizar un futuro digno y seguro para las personas con discapacidad en Andalucía.
